Ha pasado ya más de una década después del derrocamiento del régimen talibán en Afganistán, pero, todavía, existen demasiadas lacras sociales en contra de la mujer, sobre todo, si ésta decide estudiar y formarse. Sin ir más lejos, 120 alumnas y varias profesoras de una escuela en la provincia de Rajar han sido envenenadas por conservadores radicales.
Estos indeseables esparcieron polvos tóxicos por el aire del aula lo que les hacía perder la consciencia. No es la primera vez que pasa, en otros casos los talibán contaminaron el agua para envenenarlas y desde la Dirección Nacional de Seguridad Afgana están convencidos de que los talibán vuelven a pisar fuerte para que se cierren todos los colegios a los que vayan mujeres.
En Afganistán, con los talibán, ni las niñas ni las adolscentes podía estudiar, estaba totalmente prohíbio.
