Así se refleja en la prensa de aquel país en la que se indica que las empresas alemanas han iniciado distintos planes de contingencia, incluyendo preparativos para el doble etiquetado en euros y dracmas o la introducción de cláusulas de garantía en los contratos frente a la introducción de la moneda griega, en previsión de que Grecia abandone el euro.
El diario ‘Bild’ informa de que el touroperador alemán TUI ha introducido en sus contratos cláusulas para protegerse contra el potencial impacto negativo de la reintroducción del dracma en el país heleno, uno de los principales destinos turísticos de Europa. Por su parte, la cadena de supermercados Metro está adelantando los preparativos para el doble etiquetado en dracmas y euros para sus establecimientos en Grecia, así como para adaptar sus cajas registradoras. A ellas se une Deutsche Telekom, que ha enviado especialistas al país heleno para prestar apoyo a su filial OTE ante la eventualidad de un cambio en la tarificación desde euros a dracmas.
Los preparativos se han extendido, también, al sector financiero, es el caso de Commerzbank, ha acabado con toda la deuda griega en su balance y, como muchos otros bancos, ha dejado de dar préstamos a compañías con sede en Grecia.