Cuatro de los nueve trabajadores despedidos de la empresa Termavi comenzaron esta medianoche un encierro en una grúa
cuando se cumplen tres jornadas de huelga de la plantilla para pedir la readmisión de los compañeros.
La plantilla, que ha denunciado deficiencias en el servicio a causa de la contratación de trabajadores temporales, poco cualificados, exige la readmisión de 9 compañeros despedidos. LA CIG asegura que a causa de la política de Termavi de deshacerse de personal con poca experiencia, mal pagado y con escasa formación y conocimientos, se están produciendo retrasos graves y demora en las operaciones de cabotaje, carga y descarga de camiones y en los controles, empezando por los del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) del Puerto.
Las centrales han protestado contra los “abusivos servicios mínimos” decretados por la subdelegación del Gobierno y la escasa implicación de la Autoridad Portuaria que, a su juicio, no ha presionado a la empresa para que se siente a negociar este conflicto.