Este tipo, que viste uniforme y que pertenece a la Policía Fronteriza de Israel, demuestra su valentía pegándole una patada a un niño palestino, tal y como ha sido grabado por un activista. Aplicando una práctica propia de los nazis, este sujeto patea a Abdul Rahman Durqan, de 9 años, mientras otro compañero sujeta al pequeño por un brazo, tal y como se ve en las imágenes tomadas cerca de la mezquita Ibrahimi, en Hebrón.
Por este acto, que no es la primera vez que se produce (hay otras imágenes similares difundidas en noviembre de 2011 en las que un soldado desenfunda su arma y encañona con ella a un chaval de 13 años), la ONG israelí B’Tselem ha anunciado que presentará, de manera inmediata, una denuncia ante el Ejército y la Policía.
“Tanto el Ejército como la Policía fronteriza han de dejar claro a las fuerzas de seguridad que operan en los territorios Ocupados que está totalmente prohibido abusar y golpear a los palestinos”, ha asegurado el grupo. B’Tselem ha indicado que “muchos casos de abuso no son denunciados porque se han convertido en la norma y, para los palestinos, presentar quejas lleva mucho tiempo”.