Así es. Habían anunciado que nos pondrían en marcha y no han faltado a su palabra. Y este ha sido el primer capítulo. Cada viernes de este mes, como ayer, los monitores de Vigoentrena irán desarrollando una modalidad de su “Trainning Bootcamp”, un entrenamiento de grupo, en plena naturaleza en el que se trabaja con ejercicios básicos buscando la mejora de diferentes capacidades como fuerza, potencia, coordinación y resistencia, física y psicológica.
Esta vez ha sido mediante TRX, que consiste en una correa unida mediante lazos a unas asas con la que se realizan movimientos y ejercicios en los que las manos y los pies de los deportistas están sostenidos por un punto de anclaje, mientras que el extremo opuesto del cuerpo está en contacto con el suelo.
Así, los participantes, realizaron ejercicios para desarrollar la fuerza, la resistencia y la potencia muscular, el equilibrio, la flexibilidad y la coordinación, algo que para un profano, como el redactor que redacta esta información parece sencillo, pero que, como pude comprobar, exige constancia, concentración y, como recalcaron los entrenadores, “saber adecuar los ejercicios a las posibilidades del cuerpo”, algo que hace que los mismos se adapten, tanto a personas que hacen deporte habitualmente como a aquellos que lo máximo que nos movemos es la distancia que hay desde el ascensor hasta el garaje.
Y esta primera sesión, resultó. No solo fue entretenida, sino que quienes se esforzaron en seguir las instrucciones de los monitores, realizando series de 45 segundos de duración, en cada uno de los ejercicios, encontraron músculos que no sabían que tenían y hasta comprobaron que no están en tan mala forma o que, si lo están, volver a recuperarla, cambiar el cigarrillo por el deporte o librarse de la barriga cervecera cincelada a base de pinchos de tortilla y cañas, es posible…eso sí, siguiendo las instrucciones de quienes saben como acostumbrarte a ello y de eso sí que saben en Vigoentrena.
