El Celta no tira la toalla. El club vigués recibe mañana en casa al Levante (18 horas) con un único objetivo: apuntarse la primera victoria de la temporada. Los fantasmas del pasado rondan Balaídos y a los de Eusebio no les llega con la buena imagen que están dando en el arranque liguera que, aunque falto de acierto (una derrota y un empate), está empezando a devolver la ilusión a los aficionados. No en vano el celtómetro ya marca 12.687 abonados.
Aunque no lo tendrán fácil los de Vigo, ya que Joselu y Aarón se perderán la cita ante la llamada de la selección española Sub-20 para el próximo Mundial de Egipto. Algo que se recibe con alegría pero con cierto reparo por el desajuste de calendarios, que vacía las filas de los equipos y provoca que en muchas ocasiones no compitan en igualdad de condiciones. Si la Sub-20 llega a la final, que se celebrará del 21 de septiembre al 16 de octubre, el Celta tendría que despedirse de estos dos jugadores en los partidos contra el Córdoba, el Hércules, El Recre, el Albacete y el Cartagena, además de no disponer de ellos en una eliminatoria de la Copa del Rey.
Por eso, la victoria mañana contra el Levante serviría de balón de oxígeno tanto para el club como para la afición.