Pese a que el Tribunal Penal Internacional había pedido la entrega de Saif al Islam Gadafi, hijo del depuesto y muerto líder libio Muamar Gadafi, a La Haya para que éste fuera juzgado por presuntos crímenes contra la humanidad, finalmente, Libia se adelantará y lo sentará en el banquillo el próximo mes de septiembre.
Según confirmaron fuentes del Gobierno libio, el hijo de Gadafi tendrá que responder por la represión llevada a cabo por el régimen de su padre para controlar las revueltas opositoras, que al final lograron derrocarlo.
Tras varios meses de tiras y aflojas entre el Alto Tribunal y Libia en cuanto a quién debería tener las competencias para juzgarlo, parece que la balanza se ha acabado inclinando hacia el país africano.
En la actualidad, Saif al Islam sigue estando en poder del nuevo Gobierno libio después de su captura el pasado mes de noviembre. Sus abogados han denunciado ya varias veces abusos y han pedido su traslado al Tribunal Penal Internacional, por entenderse que en Libia no puede someterse a un juicio justo.