Acaba de nacer la Unión de Viticultores de Arbo (UVA) y lo hace para dar respuesta a la problemática generada en los últimos meses, cuando las bodegas de la subzona del Condado, puntos tradicionales de venta, comunicaron individualmente a los pequeños viticultores su decisión de no recoger la cosecha de este año.
Según informan desde esta plataforma recién creada, la UVA es ya una asociación firme, independiente, con vocación de permanencia en el tiempo y abierta a todos los viticultores de la subzona del Condado en la D. O. Rías Baixas.
Su objetivo es aunar fuerzas y conseguir que el trabajo y esfuerzo realizado por los pequeños viticultores no se vea perjudicado por la negativa de las bodegas locales a la compra de su uva buscando nuevas alternativas .
Se trata de dar una solución a la problemática que se presenta, facilitar la gestión de las parcelas, el relevo generacional, aumentar rendimiento y calidad de las plantaciones, incrementar su competitividad, asesoramiento técnico, tramitación de subvenciones y, al mismo tiempo, profesionalizar la actividad vitivinícola, principal recurso económico de la zona.
La iniciativa cuenta con el respaldo del Concello de Arbo y, desde la primera convocatoria celebrada, ya se han desarrollado otras dos para definir los objetivos a corto plazo entre todos los asistentes. También se eligieron unos representantes iniciales.
La UVA cuenta ya con más de 100 pequeños viticultores, principalmente, pertenecientes al municipio de Arbo, pero también hay presencia de viticultores de As Neves, Salvaterra y Crecente.
