Eso ha asegurado la sección yemení de la red terrorista Al Qaeda. En su segundo comunicado en apenas 24 horas, asegura que el asesinato del embajador de Estados Unidos en Libia, Christopher Stevens, fue la represalia por la muerte de el número dos de la organización terrorista, Abu Yahya al-Libi, en un ataque de un avión no tripulado estadounidense el pasado 4 de junio.
Al Qaeda en la Península Arábiga considera que la muerte Al-Libi alimentó “el entusiasmo y determinación” de los libios “para vengarse de quienes atacan” a Mahoma, en referencia al video antiislamico ‘La Inocencia de los Musulmanes’.
En la nota, colgada en Internet, al Qeda pide a los manifestantes que maten a diplomáticos estadounidenses, en línea con lo sucedido en el transcurso de las “naturales protestas” en la ciudad libia de Benghazi.
El grupo recomienda a los musulmanes que vivan en Occidente que emprendan ataques contra objetivos en los países donde vivan porque “están más capacitados para hacer daño y para ellos es más fácil alcanzar al enemigo”