José Pérez Alonso, el octogenario de A Cañiza que recibió una paliza en su domicilio, ha muerto en el Hospital Xeral de Vigo. José estuvo quince días en coma en la UCI, aunque se despertó la semana pasada y, tras una mejoría en su estado, fue trasladado a planta. Sin embargo, repentinamente, su estado se agravó ayer y falleció.
Su mujer, Guadalupe López, de 77 años, sigue en la UCI, en estado grave, desde el pasado día 5, cuando la pareja fue atacada por unos desconocidos que entraron en su casa de la parroquia de Achas, en A Cañiza. Estos les golpearon y patearon en la cabeza, el pecho y otras partes del cuerpo dejándolos tirados, pensando que estaban muertos.
Fue la llegada de su hijo desde Barcelona, esa misma noche, lo que les salvó la vida. Al entrar en casa se los encontró aún inconscientes. Inmediatamente, avisó a Emergencias y fueron trasladados en estado muy grave al Hospital Xeral de Vigo.
Hasta ahora, la investigación d la Guardia Civil no ha dado frutos: no hay restos de huellas ni de ADN de los asaltantes y tampoco testigos del suceso, puesto que el matrimonio vive alejado del centro de A Cañiza y sus únicos vecinos no estaban aquella noche. Ni siquiera se sabe cuál pudo ser el móvil de este ataque, aunque se especula con el robo, puesto que los ancianos acababan de cobrar la pensión.
Ahora todo depende del testimonio que pueda prestar Guadalupe, puesto que la Guardia Civil no pudo hablar con su marido a causa del estado en el que se encontraba, por lo cual la mujer es el único testigo que podría aportar algo de luz a la investigación.