Finalizadas las cuestiones procesales, el juicio por la catástrofe del Prestige volverá a reanudarse el próximo 13 de noviembre, el mismo día en que se cumplirán 10 años exactos del accidente de este petrolero, que se convirtió en el mayor desastre ecológico no sólo de Galicia, sino de todo nuestro país.
Después de que ayer echara a andar este macro juicio que se celebra en A Coruña, de que el capitán del Prestige responsabilizara de todo lo ocurrido a las autoridades marítimas y de que la Fiscalía haya incrementado en 4.422 millones de euros la cuantía de los daños ocasionados por las diferentes mareas negras, el Tribunal ha fijado para el próximo mes de noviembre el desarrollo de las sucesivas sesiones judiciales que se prolongarán hasta marzo de 2013.
En esta segunda sesión, los abogados de la acusación y la defensa del ex director general de la Marina Mercante rechazaron la suspensión del juicio planteada por el abogado del capitán del buque, sobre todo, ante la ausencia en el mismo de la compañía gestora, Universe Maritime.
Será ese 13 de noviembre cuando declaren los tres acusados, el capitán del Prestige, Apostolos Mangouras, el jefe de máquinas Nikolaos Argyropoulos y el ex director general de la Marina Mercante, José Luis López Sors.
El juicio, cuyo coste superará los 1,4 millones de euros, llega después de una compleja y larga fase de instrucción de este caso que concluyó en noviembre del año pasado y se traduce en 190 tomos elaborados de la causa y cerca de 270.000 folios.
En la vista oral están personadas más del 2.000 partes, entre ellas el Estado francés y 8 localidades galas, y un total de 2.300 perjudicados que han decidido reclamar judicialmente. Estarán presentes más de un centenar de testigos y otros tantos peritos.
Además de contra Mangouras, también están sentados en el banquillo Nikolaos Argyropoulos e Ireneo Maloto por delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente, daños y desobediencia y resistencia.
La Fiscalía pide 7 años de prisión por un delito contra el medio ambiente y 5 años de cárcel por daños en espacio natural protegido para el capitán del barco hundido.
Fue un 13 de noviembre de 2002 cuando el Prestige, a 28 millas de Fisterra, sufrió un accidente en pleno temporal con cerca de 80.000 toneladas de fuel. Tras intentar alejar el buque de la costa, el petrolero se partió en dos y se hundió.
La sentencia no se prevé antes del mes de septiembre del año próximo.