En pleno debate sobre la fusión de cajas, Caixanova defendió hoy su solvencia poniendo sobre la mesa los datos de su contribución al desarrollo económico de Galicia. La caja viguesa dedica el 15 por ciento de sus propios fondos, cerca de 300 millones de euros, a participaciones en un centenar de empresas gallegas, un rasgo singular de su modelo de negocio sin el que su ‘core capital‘ estaría entorno al 7 por ciento y su coeficiente de solvencia en el 14.
Y la inversión ha sido fructífera, ya que casi todas las empresas en las que participa la entidad financiera obtuvo resultados positivos y el impacto de las que dieron pérdidas fue “poco relevante” y, en muchos casos, se trata de compañías que “todavía están dando sus primeros pasos”. Además, Caixanova ha sumado 4,79 millones con la participación de entidades como R, Grupo Monbus o Banco Gallego y 9,9 por dividendos de la cartera empresarial.
Su inversión también es notable: 1.200 millones de euros en el tejido empresarial durante los últimos cinco años con la adquisición de participaciones en el accionariado de sociedades vinculadas directa o indirectamente con Galicia y pertenecientes, primordialmente, “a sectores con grandes expectativas de futuro” como la energía (Reganosa), las infraestructuras (Itinere, Autoestradas do Salnés o Autopista Central Gallega), las nuevas tecnologías y telecomunicaciones (R Cable y Telecomunicaciones), el textil (Adolfo Domínguez), el transporte (Monbus), el sector servicios (Geriatros), la industria audiovisual (Filmanova) y el sector financiero (Banco Gallego).
En total, más de 21.000 empleos dependientes de todas estas sociedades.
