Bueno, estamos más ruborizados que Escarlata O’Hara: 2002 personas se nos han unido en Facebook y no hemos hecho nada más que contar lo que vemos. Quizá sea eso: que contar lo que hay empieza a estar bien considerado o, al menos, parece más correcto que informar sobre lo que nos dicen que hay. O quizá nos atraiga más lo que señala el dedo que el dedo en sí, o puede que intentemos escuchar lo que se dice por ahí, lo diga quien lo diga.
Nunca se sabe, aunque se nota el peso de la responsabilidad por no cometer errores, y no sólo gramaticales y ortográficos, porque 4.000 ojos leyendo y 20.000 dedos, más dedos, tecleando comentarios sobre lo que escribimos, además de sacarnos los colores y darnos unos masajes en la paletilla que son muy de agradecer, nos obligan a estar más presentables y pensarlo dos veces antes de ponernos con una noticia.
¿Y si no fuera nada de esto? ¿Y si simplemente fuese esta sonrisa que tantos y tantos éxitos nos ha dado?… bueno ¿y qué? El caso es que a 2.000 personas no les parecemos tan malos y tanta gente no puede equivocarse al mismo tiempo, salvo en una convención de pantalones campaneros. Así que, gracias a quienes han querido apoyarnos, han sentido curiosidad, se han agregado porque se lo han pedido o han seguido la vieja tradición española: tengo un amigo, que tiene un hermano, que conoce a alguien que le ha dicho que un colega suyo escribe en vigoalminuto…si al final la comunicación se trata de esto: de informar, ¡esa es la cosa, amigo Coronado, esa es la cosa!