La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, propondrá al Gobierno de Mariano Rajoy, con el objetivo de evitar desahucios, que se establezca un acto previo de conciliación, así como un procedimiento de insolvencia de las personas físicas, en el que se establezcan plazos y prórrogas, que hagan el pago de las hipotecas más flexible.
Se trata de que se lleve a cabo un acto de conciliación antes de dejar en la calle a las 500 familias diaria de media que suelen perder su casa.
Para ello, solicita la reforma del Real Decreto-ley 6/2012, de 9 de marzo, de medidas urgentes de protección de deudores hipotecarios sin recursos, para que tenga un ámbito de aplicación mucho más amplio, y, posiblemente la modificación de la Ley de Enjuiciamiento Civil.
“Es algo que quiero llegar al Gobierno. Sé que es motivo de preocupación de todos los partidos y grupos parlamentarios”, argumentó la Defensora del Pueblo.
Estas declaraciones de Becerril llegan en un momento en el que, por fin, populares y socialistas parecen que comenzarán a ponerse de acuerdo. Y es que, este miércoles, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y la secretaria de organización del PSOE, Elena Valenciano, mantendrán un encuentro para avanzar sobre esta lacra social que son los desahucios.