Tras anunciarlo él mismo durante la inauguración de la XXII Cumbre Iberoamericana que se está celebrando en Cádiz, ahora sabemos que será el Príncipe el que asuma sus responsabilidades institucionales.
Y es que, el más que polémico accidente en Botsuana en donde participó en una cacería de elefantes le sigue pasando factura, tanto que el Rey volverá a pasar por el quirófano para ser intervenido nuevamente de la cadera.
El monarca desveló sus problemas de salud durante el brindis ofrecido en Cádiz y lo hizo en un tono bastante distendido afirmando que tenía “algunas dificultades mecánicas” para caminar y que tendría “pasar por el taller”.
Por este motivo, el jefe del Estado suspenderá su agenda y todos sus quehaceres los asumirá su hijo, el Príncipe de Asturias, quien , por cierto, está presente en una cumbre iberoamericana como la de Cádiz.
Esta nueva operación llega tan solo seis meses después de que en abril ya tuviera que ser operado por la caída que sufrió en África, en esa cacería anteriormente citada.