Pese a que pidió perdón vía Twitter, parece que al Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol no le sirve de nada.
La tarjeta roja directa que el árbitro del derbi gallego sacó a Iago Aspas tras darle un cabezazo a Marchena se traducirá en que el de Moaña no podrá jugar durante cuatro partidos.
Esto complica mucho al Real Club Celta ya que se encuentran tan sólo a 3 puntos de la salvación. Si nada lo remedia, Aspas estará en el banquillo.
Desde el club vigués ya confirmaron que recurrirán ante el Comité de Apelación que, según hemos sabido, podría pronunciarse este viernes.