Desde el anuncio de Corea del Norte de ‘declaración del estado de guerra’ con Corea del Sur, prácticamente toda la comunidad internacional no para de lanzar mensajes de calma y de contención al Gobierno dirigido por Kim Jong-Un. Se trata de que la decisión adoptada del régimen norcoreano se quede sólo en una amenaza y que no pase a mayores.
Incluso, alíados de Corea del Norte como Rusia, piden a Corea del Norte que no prosiga en su escalada de tensión y que, pese al enfrentamiento de décadas de las dos Coreas, todo se quede en eso.
“Confiamos en que todas las partes actuarán con la máxima responsabilidad y en que nadie cruzará el punto de no retorno”, declaró el embajador para misiones especiales del ministerio ruso de Asuntos Exteriores, Grigori Lógvinov, algo compartido desde la Unión Europea que instó a la calma tras el anuncio norcoreano, al que, por cierto, la comunidad internacional le da bastante credibilidad.
“Esperamos que haya calma, también para evitar cualquier error de cálculo, ahora que se están llevando a cabo ejercicios militares a ambos lados de la frontera”, mostraron su deseo desde Europa.
Asimismo, Alemania y Reino Unido también pidieron al régimen norcoreano que no traspase ninguna frontera que supondría un serio peligro para la paz de toda la región del extremo oriental de Asia.
Desde Francia exigen que el régimen dictatorial de Corea del Norte recupere la senda del diálogo y cese en sus amenazas.
Con respecto a Corea del Sur y, su más que conocido alíado, EEUU, ambos coinciden en tomarse más que en serio esa declaración de guerra del régimen de Kim Jong-Un.
En concreto, desde EEUU la portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, Caitlin Hayden, pide a Corea del Norte que dé marcha atrás a sus amenazas y aprovecha para garantizar su apoyo total a Corea del Sur. Precisamente, el ministerio de Defensa de Seúl denunció la “ofensiva” retórica norcoreana que perjudican “la paz y la estabilidad en la península de Corea”.
“Nuestro Ejército mantiene una completa preparación para no dejar puntos ciegos en la protección de la vida y la integridad de los ciudadanos”, señalaron desde Corea del Sur.
