El que había sido convocado para este martes a las 8 de la tarde, finalmente no se celebró. Como señaló el alcalde a los periodistas, los partidos de la corporación decidieron, por unanimidad, desconvocar el mismo ante la “imposibilidad de que pudiese haber debate” por la presencia de Afectados por la compra de Preferentes, que llevan semanas encerrados en la casa consistorial.
Moisés Rodríguez calificó esta fecha de “día triste” porque, recalcó, “es triste que los representantes de los ciudadanos, que somos los concejales, no podamos debatir y llegar a acuerdos”. Para Rodríguez, “a quienes se ha impedido reunirse hoy ha sido a los tudenses, son los vecinos quienes se han visto privados de su derecho a que sus representantes, democráticamente elegidos celebren hoy este pleno”.
El alcalde reiteró que todos los partidos de la Corporación apoyan a los ahorradores, “han sido estafados”, afirmó, al tiempo que reiteró que “estamos a favor de los arbitrajes y, de hecho numerosos afectados han cobrado gracias a este procedimiento…pero los concellos, sea cual sea su color político, no hemos vendido preferentes, no somos responsables de esta situación”.
El regidor enumeró todos las iniciativas impulsadas por el concello, “hemos hecho de cientos de kilómetros, hemos estado en la Xunta, en la Diputación, en consumo, con los afectados, con los responsables de Novagalicia Banco…y seguiremos haciendo las gestiones que sean necesarias”. Sobre la posibilidad, apuntada por parte de las decenas de los ahorradores que llenaban el salón de Plenos y parte de las dependencias municipales, de que los encerrados en el mismo fuesen desalojados, Moisés Rodríguez recordó que “hemos comunicado, con tiempo, que desde el día 29 no podría seguir esta situación…ahora no sé qué pasará”. Preguntado si la decisión de desalojar a los afectados era suya, el alcalde respondió que sí, aunque cuando vigoalminuto quiso saber si la misma estaba ya tomada, Rodríguez se limitó a repetir, “no sé qué pasará”.
Por su parte, los afectados insistieron en que no tienen intención, ni de irse voluntariamente del ayuntamiento, ni dejar las protestas que, adelantaron, seguirán los próximos días, “hasta que se dé marcha atrás en la quita y se nos devuelva el dinero que nos han robado…esa es solo una decisión política y son los políticos que están en el Gobierno quienes tienen que tomarla”.
Pasados unos minutos, el alcalde abandonó, sin ninguna clase de problema, su despacho y el Concello, llegando a ser aplaudido, incluso, al llegar a la calle.
