Prácticamente toda la plantilla de Unísono se concentró este lunes delante de la empresa, ubicada en Gran Vía, para protestar contra los planes de movilidad geográfica,que pretende sacar adelante la misma, trasladando de nuestra ciudad a Madrid.
Durante esta tarde volverán a parar, mientras que está previsto que el próximo miércoles y jueves se secunde una huelga, convocada por la CIG.
Precisamente, desde el sindicato nacionalista explican que si la empresa consigue llevar adelante dicho plan de movilidad geográfica, y si los trabajadores no aceptan el traslado, estos podrán ser despedidos con una indemnización de 20 días por año trabajado con un topo de 9 mensualidades.
Incluso, la situación en la que quedarían sus empleados sería peor que si se les hubiera aplicado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Según la CIG, desde agosto del año pasado -fecha en la que finalizó la vigencia del ERE y que la empresa no utilizó en su totalidad-, Unísono redujo su cuadro de personal en Vigo, deslocalizando el trabajo a otros puntos del país, así como en América Latina.