Para sostener esta idea, ha esgrimido un informe técnico del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil que lo confirma, aunque no apunta a posibles autores, como tampoco ha querido hacer el propio parlamentario, quien ha rechazado “hacer conjeturas”.
Pedro Arias ha aprovechado la habitual rueda de prensa del portavoz del PP en el Parlamento de Galicia para facilitar a los medios de comunicación una copia del mencionado informe y relatar lo ocurrido en su casa de Culleredo, donde se produjo el incendio a finales de enero mientras él y su esposa estaban en la cama.
Según ha indicado, “oímos ruidos raros y cuando intentamos abrir la puerta de la habitación comprobamos que no podíamos”. Por ello, pensando que se trataba de ladrones, se refugiaron en el baño y pidieron ayuda desde el móvil.
Según la Guardia Civil, “autores desconocidos originaron el fuego tras la aplicación de una llama directa” sobre dos sofás y un puf, que se hallaban en el salón. Así, los investigadores entienden que “el fuego no es de etiología accidental, a causa de un fallo eléctrico o de una persona obrando sin intención, sino de etiología intencionada”. De tratarse de un fuego accidental, “se constataría un solo foco principal o primario y un incendio de propagación continua, causas y efectos”, cuando se comprueba la existencia de “tres focos principales o primarios y un foco secundario” dentro del salón.
Tras afirmar que como representante público se sentía en la obligación de revelar el ataque sufrido, Pedro Arias ha rechazado “hacer conjeturas y prejuzgar autorías”, tras ser preguntado `por los periodistas sobre si la investigación apunta hacia algún modus operandi que pudiera vincular el caso con otros ataques a sedes del PPdeG o corroborar que se trata de una acción aislada.