La situación de crisis económica y el paro ha causado que 650.000 gallegos estén en situación de exclusión y que 120.000 vivan en pobreza de carácter severo, según los datos del documento «Na procura de alternativas II», de Cáritas.
Según ha destacado este miércoles, Miguel Fernández, uno de los responsables de Cáritas Interparroquial de Santiago, algunas de estas personas residen en albergues, infravivienda, o en la calle, que se corresponden con los que sufren mayores dificultades. Otros se corresponden con personas mayores “con pensiones muy bajas”.
Fernández ha recalcado que el desempleo genera exclusión social y ha insistido, en la necesidad de que las distintas administraciones se comprometan en la lucha contra esta situación y emprendan iniciativas encaminadas a que se mantengan unos ingresos mínimos a personas, a través de prestaciones por desempleo o rentas de inserción.
El responsable de Cáritas ha recalcado que el perfil de las personas que participan en los programas de esta ONG está cambiando y cada vez hay más hombres atendidos y se ha registrado un incremento de las personas nacidas en Galicia y de menores de 35 años.
A juicio de Cáritas, las políticas de austeridad “han generado una mayor vulnerabilidad de la sociedad española” y los recortes en servicios públicos de bienestar social “pueden suponer una ruptura definitiva para las personas más pobres, a quienes se abandona a su suerte lo cual vulnera sus derechos sociales”.
