Este proceso, que podría iniciarse en menos de un mes, supone que los titulares de Participaciones Preferentes y Deuda Subordinada, recibirían, a cambio de sus ahorros, acciones o, en el caso de Novagalicia Banco, que no cotiza en bolsa, participaciones del mismo. Eso sí, al dinero que tienen ‘atrapado’ en cualquiera de los dos productos financieros se le realizará una ‘quita’.
Dicho de otra menera: a los más de 50.000 afectados ya reconocidos en Galicia, a los que engañaron para que pasasen sus ahorros de una cuenta a plazo a productos financieros reservados para inversores expertos, ahora, no solo no les pagan los intereses por ese dinero, sino que, legalmente les ‘roban’ una parte para no perjudicar a los bancos en los que habían confiado, que les engañaron y cuyos directivos, no solo no han respondido por su gestión, sino que dejaron sus puestos con indemnizaciones millonarias.
Y no es una parte cualquiera la que pierden de su dinero, sino que sufren un doble ‘sablazo’. El primero al transformar sus ahorros en acciones o participaciones del banco: quienes tengan subordinadas perderán en esta operación, al menos, el 10% de su capital, a los titulares de Preferentes, el 43%.
El segundo se producirá en el momento que el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) les pague, o les compre, esas acciones o participaciones, en ese caso, se descontará de la cantidad que les quede entre un 10 y un 15%. Es decir, quien tenía 30.000 € en Preferentes, si las cambian por acciones o participaciones, se quedarán, en el mejor de los casos con 14.100 € y, en el peor, con 12.600 € (dado que más del 80% de los afectados tienen más de 70 años, dicho en pesetas, pasarían de tener 5 millones a 2.300.000 o 2.000.000).
Además de esto, quienes accedan a este ‘atraco’, deberán renunciar a emprender cualquier acción legal alguna por la ‘quita’ que hayan pactado con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
La otra posibilidad, apuntada por el abogado Agustín Gándara a vigoalminuto,y recomendable para quienes tengan más de 25.000 € en Preferentes, es no pactar dicha quita y emprender acciones judiciales. Estás, en opinión de Gándara, no se prolongarían más de un año y los afectados podrían recuperar el 90% de su capital – el 10% restante sería el que habría que descontar para pagar los gastos y tasas de los juicios-. En este sentido hay que recalcar que, hasta la fecha, la totalidad de quienes han emprendido esta vía han ganado los contenciosos planteados a las entidades financieras.
