Destacados

Los familiares de las víctimas del Yak-42 las recuerdan sin compañía de las autoridades españolas

Las familias de los 62 militares que murieron en el accidente del avión Yakovlev 42 ocurrido el 26 de mayo en 2003 en Trabzon –Turquía – han recordado este domingo a  las víctimas de la tragedia, depositando su última esperanza en que la  Justicia europea ponga fin a diez años de “impunidad contra las mentiras de quienes quisieron tapar la indignidad con la que se les trató”.

El presidente de la Asociación de Familiares de Víctimas del Yak-42, Miguel Ángel Sencianes, ha vuelto a exigir un juicio oral, después del carpetazo de la justicia española a la causa, para que los culpables de “la inseguridad con la que viajaban nuestros familiares paguen por ello”.

Según el abogado de las familias, en las próximas semanas presentará un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, contra el archivo decretado por el Tribunal Constitucional, que el pasado mes de febrero rechazó reabrir la causa por las irregularidades en la contratación del avión en el que murieron los militares. Hay que recordar que, en su día, la Audiencia Nacional también la archivó “en contra del criterio de la Fiscalía”.

Para las familias, esta decisión del alto tribunal se sumó al golpe que recibieron con el indulto que el Gobierno concedió en abril del año pasado a dos de los tres militares condenados por falsear las identificaciones de 30 de los fallecidos. “Señor Rajoy, así no se hace memoria de los 62 militares. Esto es inhumano y una burla”, así acogió, entonces, el presidente de la Asociación de Familiares la decisión del Ejecutivo.

Por “esta medida, que se ha sumado a años de mentiras”, la asociación entiende que el Ministerio de Defensa no organice ningún homenaje oficial por el décimo aniversario de la tragedia.

Las familias recordaron a las víctimas en los lugares de donde procedían la mayoría de los militares: en Burgos, en el Cuartel Castrillo del Val; en Zaragoza, ante el memorial en recuerdo de los fallecidos, y en Madrid, en el monumento a los caídos en misiones en el exterior en el Cuartel General del Aire. Además, en Burgos el alcalde inauguró un monumento en recuerdo a las víctimas.

El “único acto oficial”, según indica la asociación, es el que se realizó en el lugar del accidente. El embajador español en Turquía, Cristóbal González-Aller, recordó los diez años de este accidente y entregó, junto a los alcaldes de Maçka, la ciudad más próxima al lugar, entregarán al imán Sait Topçu la medalla al mérito y al valor otorgada por el Gobierno “por haber sido de las primeras personas en acudir al lugar del accidente y ayudar a los servicios de rescate”.

 

También te puede interesar