El fuego continúa arrasando los montes de Galicia. A la hora de redactar esta información seguía activo, y sin control, el incendio que comenzó en la tarde del jueves en Navia de Suarna, que ha arrasado alrededor de 300 hectáreas en el corazón de Os Ancares.
Además, el peor incendio de todo el verano, el de O Baixo Miño, que afectaa Oia, O Rosal y Tomiño, que ya ha quemado unas 3.000 hectáreas ha sido controlado, pero no ha podido ser extinguido, pese a que, desde hace casi una semana, centenares de personas, hasta 17 helicópteros y madia docena de aviones trabajan para acabar con él.
Sí es mejor la situación en O Barbanza: la consellería de Medio Rural ha dado por controlado – no apagado – este mediodía el incendio que desde el jueves por la tarde afecta a los concellos de Boiro y Lousame. Este fuego ha calcinado unas 450 hectáreas, según los datos provisionales oficiales. Esta madrugada, la Xunta desactivó el Nivel 1 de alerta, declarado ante la proximidad del fuego y el humo a los núcleos de población de Moimenta – Macenda – y Tállara.
Otro fuego arde en la parroquia de Vilouriz, en el concello de Toques, en el límite oriental de la provincia de A Coruña con la de Lugo. El incendio está controlado desde las 9.45 y afecta a 25,15 hectáreas de monte raso.
La Consellería de Medio Rural dio también por extinguido el incendio que comenzó el jueves por la noche en la parroquia de Esteiro, en Muros, tras haber quemado 24 hectáreas, según las estimaciones provisionales. Esta mañana se han producido dos pequeños focos de fuego en las afueras de Santiago, uno en Biduido (Ames), y otro en la propia capital, en la parroquia de Laraño.
