Había agotado todas las entradas hace días..y ayer nos explicamos porqué. La cantante estadounidense Joan Baez dejó sin habla al público que acudió al Centro Cultural Caixanova al que será su único concierto en Galicia. Conocida como la reina de la canción protesta en los años 60 al calor de la Guerra de Vietnam o la madrina del folk nos dejó disfrutar de su voz aguda y cercana.
Y eso sin dejar de ser Joan Baez, para el personal de greñas blancas, que se sabía la letra de ’Diamonds and Rust’, aunque ninguno se acordaba ya de ser hippy:a buenas horas se habrían detenido, entonces a apagar los móviles a la entrada de la platea o doblar con cuidado las cazadoras en el regazo.
Baez tampoco se acordaba…ni la guitarra era la misma, pero sí su voz, capaz de llegar a ‘Gracias a la vida’ o perderse flotando en una ovación de muchos minutos ‘Angel Band’, antes de hacer mutis por el foro detrás de una sensación de que nada como la música para fijar los recuerdos: nuevos y antiguos.
Nominada para los Grammy en la categoría folk por este trabajo, con ‘Day after tomorrow’ Baez regresa a los escenarios tras 5 años de silencio con un repertorio que abarca lo puramente tradicional, el country y el pop-rock.
Medio siglo en los escenarios
La carrera de Joan Baez arranca en Boston con la actuación en el Newport Folk Festival de 1959, gracias al que grabó su disco debut con 13 canciones tradicionales y alguna balada infantil.
En los años 60 fue el rostro de la música folk, convirtiéndose en la estrella de festivales y giras y cantando en actos políticos, como la marcha sobre Washington de 1963 por los derechos civiles. Luchadora contra la Guerra de Vietnam, su repertorio se desplazó del material tradicional al socialmente comprometido junto a Bob Dylan.
Influenciada por la aparición de The Beatles en Estados Unidos y el rock de Bob Dylan, Baez aumentó su instrumental, llegando a usar una orquesta entera en alguno de sus trabajos. Se acabaron los 60 y ella continuó experimentando, como se comprueba en discos como ‘Baptism’ (1968), en el que recita poesía, y en ‘Any day now’ (1968), un doble disco de canciones de Dylan con ambiente de country. A principios de los 70 se centra en el pop rock y empieza a escribir sus propias canciones, lo que culminó en el superventas ‘Diamonds & rust’ (1975), que fue seguido por ‘Gulf Winds’ (1976), escrito enteramente por ella. Grabó discos para diversas compañías y, en 1993, realizó ‘Rare, live & classic’, un triple disco de retrospectiva.
