El ministro del Interior ha insistido este lunes que las ‘concertinas’ instaladas en la vallas fronterizas de Melilla y Ceuta son elementos de seguridad que tienen un efecto disuasorio y que provocan heridas leves, “superficiales”, a aquellos que intentan sobrepasarlas.
Tras la vista con su homólogo italiano, Angelino Alfano, al centro de operaciones de la Guardia Civil, Jorge Fernández Díaz ha subrayado que las concertinas son una medida “no agresiva”, cuyo objetivo es impedir la entrada ilegal de inmigrantes a España y, por tanto, a la Unión Europea.
El responsable de Interior ha confirmado que el presidente del Gobierno tiene ya un informe sobre estos elementos de seguridad y que está a la espera de conocer su valoración, aunque Fernández Díaz ha asegurado que el jefe del Ejecutivo” conoce este asunto porque fue ministro del Interior”.
Preguntado por las declaraciones de Antonio Camacho, quien fue secretario de Estado de Seguridad y ocupó la cartera de Interior durante el Gobierno socialista, quien ha afirmado que son “totalmente falsas” las informaciones publicadas que mantienen que en 2005 se reforzó la valla de Melilla con concertinas, Fernández Díaz no ha querido polemizar aunque ha subrayado que “las vallas tanto en superficie como en altura que están instaladas en Ceuta no las ha inventado este Gobierno”.
“Esa es la realidad y dicho esto, en la defensa de los derechos humanos nadie nos va a ganar”, ha añadido Fernández, quien ha repetido que estos elementos están “estandarizados en su uso, son pasivos y no son agresivos”, al tiempo que tienen como finalidad “impedir el negocio de las mafias de la inmigración irregular”.