Agentes de la Policía Nacional han interceptado en el puerto de Marín 103 kilos de cocaína ocultos en un contenedor de plátanos procedente de Colombia.
Durante el operativo policial se ha detenido a cuatro personas como presuntas responsables de la planificación, envío y recepción de la sustancia Dos de los arrestados contaban con numerosos contactos en el país sudamericano para proveerse de la droga y en Galicia llevarla a todo el Estado.
Además se han practicado cuatro registros en tres domicilios -dos de ellos en Pedre y A Illa de Arousa y un tercero en Madrid-, y en una empresa ubicada en Ribadumia.
La operación se inició en de julio cuando los agentes tuvieron conocimiento de que uno de los principales investigados, un español ya conocido por las fuerzas de seguridad por contar con antecedentes por hechos similares, planeaba el envío de unos 100 kilos de cocaína mediante el método del “gancho ciego” a través del puerto de Marín.
Este envío era una prueba para posteriormente enviar más droga en contenedores y ofrecer de este modo a sus compinches, dos ciudadanos colombianos, seguridad total en el puerto a la hora de extraer y sacar la mercancía.
Los socios colombianos aceptaron organizar el envío desde el puerto de Turbo y así verificar la ruta. Para supervisar este envío uno de ellos viajó hasta el país sudamericano y gestionó los trámites necesarios para llevar a cabo la operación.
Ya a su regreso y con todo previsto, mantuvo una reunión en Madrid con dos de sus contactos, el principal investigado y un compatriota colombiano, donde les hizo entrega de los datos del contenedor que transportaba la mercancía ilícita, así como la distribución de la misma y una cantidad de dinero.
Para llevar a cabo la última fase de la operación el colombiano supervisor de la operación viajó hasta Pontevedra donde mantuvo contacto con su contacto gallego y con otro español encargado de mantener relación directa con los trabajadores del puerto.
Finalmente, con toda esa información, la tarde del lunes, día 25, los agentes procedieron a la inspección del contenedor objeto de la investigación, donde comprobaron que llevaba los precintos duplicados de los originales.
Tras proceder a su apertura, descubrieron entre las primeras cajas del palé de plátanos – en el interior de cinco de ellas- diversas mochilas de color negro que guardaban en su interior veinte paquetes de cocaína en cada una que, en total, pesaban 103 kilos.