Literalmente: los bomberos de Nigrán han tenido que ir a pie, con una sulfatadora, a apagar un incendio que se ha producido en una casa abandonada de A Ramallosa.
Esta situación se debe a que el camión que usaban lleva un mes averiado y no disponen de vehículo alguno para realizar su trabajo. La realidad es que tampoco tenían un auténtico camión de bomberos sino una “motobomba para incendios forestales” que, en su momento, pasó a ser un ‘coche para todo’ y que, 10 años después de entrar en servicio ha dicho ‘hasta aquí’. El concello asegura que no hay dinero para pagar la reparación del motor, “que ya ha dado todo lo que podía dar”.
En esta ocasión han sido afortunados, además de su ingenio han dispuesto de la ayuda de sus compañeros de Porriño, que sí tienen camión y que han ido en él hasta el lugar donde estaban las llamas.
¿Cuál es la solución? La misma parece pasar por la Xunta, exactamente porque el gobierno gallego haga una nueva adjudicación de motobombas y que una de ellas se destine a Nigrán.
