Este jueves, a las 10 de la mañana, en Vigo, empieza el juicio por el presunto homicidio de Cristina González Sacau- ocurrido en Coruxo el 11 de octubre de 2011-. La Fiscalía pide 15 años de prisión para Francisco Álvarez Martínez, al que acusa de acabar con la vida de su ex mujer clavándole un cuchillo en el cuello hasta en cuatro ocasiones. Tras el crimen, el acusado simuló presuntamente un robo en la vivienda y ocultó los objetos en dos agujeros en un camino forestal.
Francisco se entregó el mismo día en la comisaría de Policía donde se autoinculpó de la muerte de su mujer. El cadáver de Cristina fue hallado después de dicha confesión en la vivienda familiar.
El día 1 de diciembre de 2011, Francisco mantuvo la versión de los hechos que había relatado a la juez el 14 de octubre, según la cual apuñaló en el pecho a su ex mujer durante una pelea y tras arrebatarle un cuchillo que ella blandió para obligarle a abandonar la casa.
Álvarez, que siguió admitiendo haber matado a Cristina, aseguró que en ningún momento tuvo intención de hacerlo y que no sabía qué pudo pasar para que ocurriese esta tragedia, limitándose a decir que los hechos ocurrieron en un “forcejeo involuntario”, pese a que el cuerpo de Cristina presentaba varias heridas punzantes en el cuello y “tres puñaladas”, una de ellas mortal. Sobre su presencia en la casa, Francisco, indicó que había entrado para avisar de que se habían dejado encendidas varias luces y de que estaba abierta la puerta trasera.
Esta versión no le pareció fiable a la familia de la víctima dado que la misma, según su abogado, no era compatible con varios cortes que la víctima tenía en el cuello, alguno muy profundo, y tampoco con los de las manos, lo que significaría que se defendió de la agresión.
