Ciencia y Tecnología

El ser humano se convierte en la fuente de alimentación

Científicos americanos han desarrollado un generador que aprovecha el movimiento cotidiano para crear electricidad, según el Georgia Institute of Technology. Las posibilidades comerciales y ecológicas permiten encender el móvil con caminar unos metros o frotándolo con la palma de la mano, sin necesidad de enchufes.

La idea está basada en el efecto piezoeléctrico, un fenómeno que ocurre en determinados cristales que, al ser sometidos a tensiones mecánicas, adquieren cargas eléctricas en su superficie. Los científicos descubrieron que el alternador generaba energía en exceso en el momento que dos superficies del dispositivo se rozaban entre sí produciendo electricidad estática. Al descubrimiento lo clasificaron como el primer nanogenerador triboeléctrica o TENG.

El equipo investigador señala que la energía mecánica no requiere de dispersas redes de distribución de alto coste económico, sino que aprovechará la resistencia humana de manera sostenible. La idea se ha empleado en plantillas de zapatos, silbatos, pedales, alfombrillas, mochilas y boyas oceánicas.

 

También te puede interesar