Esta es una de las denuncias que han hecho este lunes los representantes de todos los sindicatos presentes en el Servizo Galego de Saúde (Sergas), durante la rueda de prensa de la manifestación convocada el sábado, 21 de junio – 12 horas en el MARCO- en defensa de la sanidad pública.
Según han recalcado, es un hecho “muy habitual” que a pacientes que están en lista de espera quirúrgica en el área de Vigo se les ofrezca la posibilidad de operarse en otras áreas sanitarias, “como Burela o Monforte”, a lo que hay pacientes que acceden puesto que “si no lo hacen vuelven al final de la lista y tienen que esperar, de nuevo”. Los sindicatos advirtieron de que en estos casos el seguimiento tras la operación se hace en el área en la que vive el enfermo, “no el cirujano que lo ha atendido” y que al aceptar “pierden el derecho a la asistencia sanitaria domiciliaria”, tal y como recoge la Ley de Garantías, “aprobada por el Partido Popular”.
Esta es solo una de las muestras, indicaron los representantes sindicales, del “deterioro de la sanidad pública en Galicia”, un proceso, subrayaron, que es más evidente en el Área Sanitaria de Vigo, donde la lista de espera “supera las 60.000 personas” pese a lo cual, señalaron, “el Sergas ha anunciado un cierre de camas en verano que es el mayor de la historia”.
A su juicio, este cierre de camas, “y también de quirófanos”, es el paso previo de lo que pasará una vez que empiece a funcionar el nuevo hospital, “este cierre continuará durante todo el año para que los pacientes vayan acostumbrándose a lo que será la sanidad en Vigo con el nuevo hospital”.
Los representantes sindicales alertaron del deterioro de la atención a los enfermos, que lo que lleva aparejada es una “clara privatización de los servicios”, como prueba la reducción de personal, “con el despido del 14% de toda la plantilla en los últimos años”, la contratación de personal de las bolsas “muchísimos de ellos por un día, incluso por 4 horas”; el descenso de la inversión en la sanidad pública, “300 millones desde que gobierna Feijóo, a los que se añadirán otros 150 más una vez que empiece a aplicarse el Plan de Estabilidad presentado por Rajoy a la Unión Europea”; el copago de los servicios, la derivación de pacientes a hospitales y clínicas privadas, “que lleva, sibilinamente, al financiamiento con dinero público de clínicas privadas, algo que se hará en toda la sanidad pública de Galicia de manera que la gestión pasará a manos de particulares creando enfermos de primera, que son los que puedan pagarla, y de segunda, todos los demás”; la disminución en la calidad de la atención, o la creación de ‘Áreas de Gestión Clínica’ que estarán integradas por ‘microempresas’ que reducirán, “aún más” el gasto en medicamentos y pruebas diagnósticas.
Por todo ello, llaman a los ciudadanos a participar en esta manifestación para “impedir que el Servicio Público de Salud desaparezca, de manera que en unos años todo estará en manos privadas, con la sanidad pública descapitalizada y unos cuantos haciendo negocio con la salud de las personas y con su dinero, porque no olvidemos que la sanidad la pagamos todos con nuestros impuestos, no es gratis”.