Estas son las ‘raíces vigorosas’ de la economía española: además de ser líderes europeos en paro, también lo somos en pobreza laboral. Actualmente somos el tercer estado de la UE con más trabajadores pobres- personas que pese a tener un empleo no ganan lo suficiente para vivir-, el 12,3%. Solo nos supera Grecia- con el 15%- y Rumanía- con el 19,5%-.
De acuerdo con el último informe de la Fundación Primero de Mayo, los autónomos tienen mayor riesgo de caer en la pobreza que aquellos que tienen un empleo por cuenta ajena, la tasa de pobreza de estos es del 12%, mientras que entre los autónomos supera el 35,5%– solo por detrás de Rumanía-.
Además, el 16,2% de los empleados con contratos temporales están en el umbral de la pobreza, más de dos puntos por encima de la media europea, un porcentaje que aumentará el año que viene y que en el caso de los contratos parciales se acercará al 20%.
De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), ha aumentado el empobrecimiento de la población asalariada y, además, ha aumentado el porcentaje de personas que trabajan por el salario mínimo- 645 €– que ha pasado del 10,3% a finales de 2010 al 12,3% dos años más tarde.
