Diálogo. Eso es lo que ha pedido el príncipe de los gitanos para solucionar la marcha de más de 300 gitanos de Tui y O Porriño, al tiempo que ha afirmado que los problemas que se han producido en los últimos días y la responsabilidad de ese ‘éxodo’ fueron causados por los cuatro pastores evangelistas que fueron desterrados.
“De los cuatro pastores evangelistas nadie se fía porque han incumplido un apartado básico de la ley gitana: no puede convocarse a una anciano a una reunión diciendo que son cuatro cuando en realidad eran 300”
Sinaí Jiménez ha recalcado que él nunca ha intentado dividir a este colectivo y ha insistido en nombre de la familia real gitana que en Galicia “siempre se ha respetado y querido a todos los gitanos, incluidos los zamoranos”. Incluso ha ido más allá subrayando que se les ha dado preferencia por delante de otros que querían tener puestos en los mercados.
“Unos cuantos gitanos ricos pretendían hacer una consulta que, lo único que buscaba, era excluir a la clase media, baja y pobre de la sociedad gitana de poder acceder a un puesto de trabajo vital para sus economías familiares”. Por ello ha insistido en que los Consejos de Ancianos son los únicos que pueden solucionar este problema.
