Martin, ha calificado el acuerdo salarial que ha firmado con el Sindicato Independiente de la fábrica- el resto de las centrales no le han dado su visto bueno- como la manera de “afianzar” la producción y “mantener un potencial por encima de los 500.000 vehículos al año”.
En base a ello, Matin subraya que el proyecto para la fabricación de las nuevas furgonetas de la empresa- el conocido como K-9-, al que opta Vigo, es “el futuro de la planta” y ha adelantado que ya ha enviado a la dirección de PSA en Francia una nueva propuesta para optar al K-9 en la que se incluye una bajada del 5% de los suelos o la eliminación y recorte de varios complementos, con los que espera que el nuevo proyecto acabe en Vigo.
De ser así, insiste el director de PSA, “este nuevo proyecto hará posible un ambicioso plan industrial que transformará profundamente la planta de Vigo y la situará en posición de recibir nuevos modelos en el futuro”, y ha afirmado que “hoy, más que nunca, es necesario el esfuerzo” que se ha pedido. Yann Martin agradece la “comprensión” de los trabajadores y les asegura que este sacrificio será “ampliamente recompensado”.