El profesor Sergio Q.M. fue detenido este lunes junto a los tres sacerdotes sospechosos de ser los presuntos autores de los abusos sexuales a menores que investiga el Juzgado de Instrucción número 4 de Granada, sigue en su puesto. Esto es posible porque quien tiene que nombrarlo y cesarlo, el arzobispo de Granada, que se llama Javier Martínez y que en un país de la Unión Europea y en pleno siglo XXI tiene la prerrogativa de poner y quitar profesores, ha permitido que siga dando clases. El hecho es aun más grave porque el arzobispo Martínez conoce, al menos desde agosto, la supuesta implicación de este sujeto en el caso de los abusos sexuales.
Por si todo ello fuese poco, resulta que la ley no permite a la Junta de Andalucía, que representa a los ciudadanos de aquella comunidad, el despedir al mencionado Sergio Q.M. que lo más que ha podido hacer es instar al arzobispo Martínez a que cese a este profesor de religión.
Sergio Q.M., estuvo dando clase hasta el viernes y el Arzobispado no ha comunicado en ningún momento a la Delegación Provincial de Educación, pese a la detención de este sujeto, la retirada de su idoneidad como docente, según han asegurado fuentes institucionales.
Sergio Q.M., seglar que permanece arrestado junto a los tres sacerdotes, fue propuesto por el Arzobispado para impartir clases desde 2007…sin embargo no ha seguido la misma suerte que los curas: el arzobispo Martínez-que se hizo popular por editar el libro ‘Cásate y sé sumisa’- si los suspendió de sus responsabilidades el pasado 15 de octubre, después de que el joven Daniel denunciara los hechos ante la Fiscalía, aunque no adoptó ninguna medida cautelar contra el profesor de Religión, que es hermano de M.Q.M., párroco de la Iglesia San Juan María Vianney, también vinculado al grupo de los ‘romanones’ e investigado por presunto encubrimiento.
