Esta mañana visitaron las obras de la depuradora del Lagares, el alcalde de Vigo, Abel Caballero; el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina; y el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán. Durante el encuentro han comunicado que si los plazos se cumplen, la depuradora estará terminada el próximo año.
La nueva EDAR tendrá una capacidad máxima de tratamiento de 800.000h-e en términos de DBO, y su dimensionamiento hidráulico evitará los alivios directos a la ría durante los episodios de tormenta. Las obras incluyen la ejecución de una EDAR provisional destinada a garantizar la continuidad temporal del tratamiento de las aguas residuales durante la ejecución de las obras.
En la línea de agua habrá un fase de pretratamiento y tratamiento primario de todo el caudal, que se resuelve con decantadores lamelares reforzados durante los episodios de lluvia, por un proceso físico-químico; un tratamiento secundario, biológico mediante la biofiltración, con la eliminación de nitrógeno por vía biológica y de fósforo por vía química; y tratamiento terciario, desinfección del efluente mediante radiación ultravioleta (UVA).
El emisario submarino se inicia en la cámara de carga, situada en el recinto de la EDAR, dotada de un bombeo en funcionamiento según la combinación de valores del caudal y de las cotas de marea. El emisario tiene dos tramos, el primero terrestre, con una longitud de 776 metros; y el segundo submarino, de 3.016 metros de longitud, que incluye un túnel hincado de 695 metros y tubos de hormigón armado de 1.800 mm de diámetro interior.
A continuación del tramo submarino, el emisario está formado por una tubería de polietileno de alta densidad (PEAD), de 2000 mm de diámetro exterior, que finaliza en un tramo difusor formado por 31 cabezas difusoras, con dos bocas de salida de efluente cada una.