Si alguien pensaba que sigue existiendo la democracia dentro de la Unión Europea puede ir olvidándolo. Si hace unos días, apenas unas horas después de que se convocasen elecciones legislativas en Grecia, el Fondo Monetario Internacional (FMI), temiendo una posible victoria de la izquierda, liderada Syriza, cortaba la llegada de dinero a Atenas, ahora quien quiere condicionar a los griegos es la canciller Merkel.
Según informa el semanario ‘Der Spiegel’, la canciller y su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble- el hombre que, de hecho, dirige la economía europea- están dispuestos a que Grecia salga del Euro. Y es que ya no creen que haya peligro de ‘contagio’ y que otros países puedan dejar la unión.
Este sería el planteamiento alemán que permitiría forzar aún más las negociaciones con Grecia en la cual Alemania plantearía que la salida de Grecia es inevitable si la alianza de izquierda Syriza gana en las urnas y resuelve dejar de pagar la deuda pública.
Ni la Cancillería alemana ni el Ministerio de Finanzas han querido comentar la información. Un portavoz del Ministerio remitió a declaraciones efectuadas el lunes pasado por Schäuble en las que advirtió que “si Grecia emprende otro camino, será difícil” y en las que también decía que “las elecciones no modifican los acuerdos alcanzados con el Gobierno griego. Cada Gobierno nuevo deberá cumplir con los acuerdos a que llegó el anterior”.