El Papa Francisco ha engordado y tendrá que hacer régimen, informaron varios medios italianos que citan a sus médicos. Estos le han recomendado comer menos fideos y dulce de leche para perder algunos kilos y aliviar así los dolores de una ciática, que padece habitualmente.
En una reciente entrevista a la televisión mexicana, Francisco había asegurado que su mayor deseo sería poder escaparse del Vaticano, “sin que nadie lo reconociera” para pasearse por Roma y comer una pizza.
Al parecer, este aumento de peso no tiene que ver tanto con su alimentación o el estrés, sino principalmente a la falta de ejercicio para un hombre de 78 años acostumbrado a largas caminatas por Buenos Aires. “En Buenos Aires yo era muy callejero. Iba y venía por las parroquias”, le dijo el Papa a la periodista mexicana Valentina Alazraki en una entrevista que dio al canal Televisa…claro que una cosa es Buenos Aires y otra el minúsculo estado vaticano.