Profesionales de la Sanidad de Vigo han señalado este lunes que lo que ellos venían denunciando desde hace meses, se ha cumplido: el nuevo hospital tendrá 845 camas “no las 1.465 que las distintas conselleiras de Sanidade y el propio presidente de la Xunta vienen anunciando desde el año 2010”.
Además de eso, han señalado que con el cierre del Xeral, Cíes y el Rebullón y de camas en el Meixoeiro y en el Nicolás Peña, el número de camas disponibles en el área sanitaria de Vigo, “queda prácticamente como hasta ahora”.
Según los datos de los que disponen los trabajadores, con el cierre del Hospital Xeral se pierden 590 camas, 78 más del Rebullón y 45 del Cíes, a las que hay que sumar las 75 que pierde el Meixoeiro y las 49 que se cierran en el Nicolás Peña. Ello significa que sumando las 845 del nuevo hospital, las 347 que quedan en el Meixoeiro, y las 68 del Nicolás Peña, la realidad es que el Área de Vigo se queda con 1.260 camas-hasta ahora tenía 1.252.
Para los profesionales sanitarios esto es “una burla”, considerando que Vigo tiene la mayor lista de espera de Galicia, en cirugía, “19.000 pacientes más los 5.000 de Povisa”, más las de pruebas diagnósticas, lo que supondrá que no se solucionará nada con este nuevo centro.
A esta denuncia los trabajadores han unido otra: el coste final del ‘Álvaro Cunqueiro’ que, subrayaron, pasará de los 400 millones que, de acuerdo con los primeros proyectos había que invertir para levantar un hospital completamente público, a los “más de 1.000 millones” que costará este que, recordaron, tiene privatizado el aparcamiento-por el cual habrá que pagar cuando haya que visitar a un paciente-, la seguridad, la limpieza o la comida, “cuando la que se hacía en el Xeral estaba considerada como de excelente calidad por los pacientes”.
Este hecho se suma a otro que “durante 50 años, los que habrá que pagar un cánon, los gallegos estaremos hipotecados con las empresas privadas que se enriquecerán con el nuevo hospital”. A su juicio, lo que se ha hecho en Vigo ha sido “seguir el modelo madrileño a rajatabla”, haciendo de la Sanidad un negocio y procurando deteriorar la sanidad pública, “con peor atención, menos personal, menos recursos, menos camas y peor atención”, para que los pacientes opten por la privada.
Para denunciar públicamente ese cierre de camas, así como la falta de información por parte del Servizo Galego de Saúde (Sergas) y el gerente del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI) acerca de los cambios que llegarán la apertura del Hospital Álvaro Cunqueiro, los sindicatos han convocado una manifestación que recorrerá que saldrá del Hospital Xeral a las 11 de la mañana del martes 16 de junio.