Siete concellos de Galicia están entre los destinos más asequibles de alquiler en verano en primera línea de playa, según un informe elaborado por Tecnicasa. Son Esteiro, Portosín, Boiro, Muros y Ribeira, en A Coruña, y Burela y O Vicedo, en Lugo. De acuerdo con este análisis, el precio medio del alquiler en primera línea de playa sube un 7% este verano, hasta 595 €, frente a los 552 de 2014.
El lugar más caro para veranear es la Playa de’n Bossa, en Ibiza, donde un apartamento de 70 metros cuadrados cuesta 1.680 € a la semana, mientras que el más barato se localiza en Lugo, donde se puede alquilar un apartamento de 60 metros cuadrados sin superar los 200 € semanales.
Si se cruzan estas tarifas con la renta media neta mensual por hogar en España, una familia española necesitará el 27% de su sueldo de un mes -frente al 25% en 2014- para pagar una semana de vacaciones en la costa.
En comunidades como Extremadura (37%), Murcia (34%), Canarias (33%) y Andalucía (335) las familias deberán hacer un esfuerzo mayo, mientras que en otras como País Vasco y Navarra destinarían entre un 21% y un 22% de su sueldo mensual al alquiler de una semana de vacaciones en la costa.
No obstante, la oferta de alquileres en las localidades costeras es “muy heterogénea” y por lo tanto, los precios de las viviendas vacacionales varían en función de aspectos como la tipología, la superficie, las dotaciones de las urbanizaciones o detalles como la inclusión o no de plaza de garaje.