Estados Unidos y Cuba restablecerán este lunes sus relaciones diplomáticas, interrumpidas hace 54 años, y abrirán embajadas en las respectivas capitales. El canciller cubano, Bruno Rodríguez, hará una visita histórica a Washington –la primera de un ministro de Exteriores de Cuba desde 1959- y se reunirá con su homólogo, el secretario de Estado, John Kerry.
Siete meses después de que los presidentes Obama y Castro, anunciasen un acercamiento entre ambos países, los dos gobiernos pondrán fin a décadas de hostilidad con la reapertura de las embajadas y la reanudación de las relaciones diplomáticas que rompieron en 1961.
Rodríguez asistirá a la reapertura de la embajada de Cuba, un edificio construido en 1917 a unos tres kilómetros de la Casa Blanca y que ahora acoge la Sección de Intereses cubana en Washington. En la ceremonia se izará la bandera cubana frente al edificio, se descubrirá una placa que identificará a la mansión como la embajada de Cuba y el ministro pronunciará un breve discurso.
Por lo que se refiere a la reapertura de la embajada estadounidense en La Habana, se hará sin festejos: Estados Unidos aplazará la ceremonia hasta que Kerry visite Cuba, un viaje aún sin fecha fija que marcará la primera parada en Cuba de un secretario de Estado estadounidense desde 1945.