Según informa el diario The Independent, el Gobierno británico celebrará el referéndum sobre su permanencia en la Unión Europea en junio de 2016 y anunciará el calendario de votación en la conferencia anual del Partido Conservador, en octubre.
The Independent indica que aunque la consulta estaba previsto para 2017, el primer ministro, David Cameron, considera que situar la fecha en los próximos doce meses facilitará las negociaciones con sus socios europeos.
Cameron pretende conseguir una serie de concesiones en la UE, entre las que se encuentra la posibilidad de renunciar a nuevas medidas de integración en el bloque y la retirada de beneficios para inmigrantes procedentes de países de la UE.
Según las fuentes consultadas por The Independent, la situación de Grecia también ha influido en la decisión de Cameron de adelantar la fecha: el rechazo de Bruselas a dejar que un estado miembro abandone el bloque ha reforzado la opinión del primer ministro, que confía en conseguir las reformas que desea, entre ellas, que los parlamentos nacionales puedan unirse para vetar o modificar iniciativas legislativas de la Comisión.