Garzón vuelve al Tribunal Supremo. Hoy a las 10 y media de la mañana declara ante el magistrado Manuel Marchena que lo ha citado como imputado en los presuntos delitos de cohecho y prevaricación. En este caso al juez de la Audiencia Nacional se le acusa de haber percibido 302.000 dólares por la organización de unos cursos en la Universidad de Nueva York en 2005 y 2006, cursos que fueron patrocinados por el Banco Santander.
Los letrados querellantes, José Luis Mazón y Antonio Panea, vinculan la el cobro de esa cantidad con la decisión de Garzón de no admitir a trámite una querella formulada contra el presidente del Santander, Emilio Botín.
La Universidad de Nueva York ha hecho llegar al Tribunal Supremo un documento en el que certifica que la mencionada cantidad fue percibida por aquella institución académica que, además de administrarla, fue la encargada de gestionar la realización de las jornadas, temarios y contratación de los ponentes, extremo que habría sido ratificado, también por escrito, por los responsables del Banco de Santander.
Es la segunda vez que Garzón comparece ante el Supremo: la primera fue el 9 de septiembre de 2009 en relación con la querella interpuesta contra él, por iniciativa del sindicato de funcionarios Manos Limpias y Falange Española y de las JONS, por una presunta prevaricación cometida cuando abrió una causa en la Audiencia Nacional por las desapariciones durante la dictadura de Franco.