Según ha declarado el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, a la Cadena Ser, el ministro español de Economía, Luis de Guindos, conocía, hace semanas, la advertencia hecha por la Comisión Europea al Gobierno Rajoy de que España corre riesgo de incumplir los objetivos de déficit de este año y del que viene.
“Hablé con De Guindos el viernes, le dije que constatábamos el riesgo de incumplimiento. Volví a hablar con él antes de entrar en la sala del Eurogrupo. Repetí lo mismo que le dije tres semanas antes que, en base a nuestros datos, existía ese riesgo y él mismo estaba de acuerdo”, dijo Moscovici.
Pese a ello, tanto De Guindos como el presidente Rajoy han negado, en las últimas, horas, tajantemente, incluso de manera agria, que vaya a haber tal incumplimiento.
Este incumplimiento supone varias cosas: la primera que el ministro de Economía y el presidente han faltado a la verdad; la segunda que los presupuestos que quiere dejar aprobados el actual gobierno antes de las Elecciones Generales del 20 de diciembre no valen para nada, dado que no reflejan esa desviación, que podría acercarse a los 10.000 millones de euros; la tercera, que el Gobierno Rajoy no ha cumplido, ni una vez en estos cuatro años, no solo los objetivos de déficit de la UE, sino los propios que se había fijado el Ejecutivo-como tampoco lo ha hecho con la deuda pública o la creación de empleo- y, por último, que el próximo gobierno deberá hacer frente a recortes por esos 10.000 millones que, en conjunto, son equiparables a los que el ejecutivo del PP aplicó a la Sanidad, la Dependencia y la Educación, en su primer año de gestión.