Médicos Sin Fronteras (MSF) y Greenpeace han puesto en marcha una operación conjunta para rescatar a las personas que arriesgan sus vidas en la peligrosa travesía por mar entre Turquía y Grecia. Los equipos de MSF y Greenpeace emplean tres lanchas inflables de casco rígido con base en la costa norte de Lesbos que dan apoyo y trabajan en coordinación con la Guardia Costera griega.
Equipos médicos de MSF también están preparados en los puntos de desembarque para facilitar atención de urgencia a personas en condición crítica y garantizar su traslado al hospital si fuera necesario, para lo que cuentan con tres ambulancias. Estas actividades complementan los esfuerzos de grupos de voluntarios que ya prestan asistencia a personas que llegan a las islas griegas.
Desde el 28 de noviembre, los equipos de MSF y Greenpeace han asistido a cientos de migrantes, refugiados y solicitantes de asilo. Decenas de ellos viajaban en barcos en evidente riesgo de naufragio. En tierra, los equipos médicos de MSF han asistido a 20 personas que presentaban problemas de salud graves, de los que nueve tuvieron que ser trasladadas al hospital para recibir atención especializada.
En los próximos días, MSF planea ampliar la capacidad de rescate en otras islas con el despliegue de tres lanchas más. Los equipos ayudarán a las personas que viajan en embarcaciones en riesgo de naufragio y facilitarán asistencia médica una vez llegados a tierra.
“Horrorizados ante una crisis de refugiados en el Mediterráneo que no cesa, nos hemos visto obligados a actuar y brindar apoyo en todo lo que podamos“, explica Alexandra Messare, director del programa de Greenpeace Grecia. “No es un delito tratar de huir de los conflictos, la pobreza y los abusos de derechos humanos en sus países de origen con la esperanza de una vida mejor. Creemos que quienes tienen la capacidad de ayudar deberían hacer todo lo posible. Aportamos nuestra experiencia en el mar a esta colaboración con MSF con la esperanza de salvar vidas“.
A pesar del deterioro de las condiciones meteorológicas a medida que se acerca el invierno, solo en noviembre 140.000 personas cruzaron desde Turquía a las islas griegas según cifras de ACNUR; el 65% llegaron a Lesbos. Desde septiembre, 330 personas, la mayoría de ellas niños, perdieron la vida en el Egeo mientras intentaban llegar a un refugio seguro en Europa.
Desde julio, los equipos médicos de MSF en Lesbos han realizado 10.169 consultas médicas; 6.154 de estas en los últimos dos meses. Desde octubre, los trabajadores humanitarios de MSF han comprobado un incremento del número de infecciones de las vías respiratorias y de hipotermias ligadas a un estado del mar cada vez más frío y agitado.