Ricardo Méndez, de 75 años, está fuera del Cunqueiro. Este hombre que hace unos días se había caído y se había roto la pelvis ha tenido que salir de la sala de observación de Urgencias del hospital “por orden de la dirección”, según ha indicado la familia.
A pesar de que alrededor de la 1 de la tarde le habían dicho a su hijo que “el jefe del servicio de Urgencias o una persona de la Gerencia” le explicaría cuál era la causa de esta decisión, finalmente ha sido una doctora la que le ha indicado que no hay motivo médico que justifique su estancia en el centro, por lo cual le ha dado el alta.
Las alternativas que ofrecía el Cunqueiro a este hombre eran o irse a su casa en Vigo, donde necesitará atención constante, puesto que no puede moverse, o enviarlo a una residencia a Pontevedra. En ninguno de los dos casos se le garantizaba una ayuda gratuita para atenderlo- una situación que se complica por el hecho de que él era quien se ocupaba de su mujer, que padece una invalidez del 74%, que le obliga a estar inmovilizada en la cama y con oxígeno durante 16 horas al día, por lo cual precisa vigilancia permanente-.
En la actualidad, Ricardo cobraba una ayuda de poco más de 300 € para la atención de su mujer y la familia debía de hacer frente a más de esa cantidad para completar el coste de una persona que se desplazaba a su domicilio para asearla y sustituir a su marido mientras este hacía la compra o se ocupaba de distintos trámite fuera de casa.
Hoy por la mañana, la doctora le ha explicado que tenía que abandonar el hospital y, según su familia, le ha informado de que, si se negaba, la dirección del mismo se vería obligada a pedir un mandamiento judicial que permitiera su traslado a la residencia de Pontevedra.
Finalmente, su hijo ha decidido que vuelva a su casa, en Vigo, después de que la médico le haya instado a que “si tiene cualquier problema que lo traiga de nuevo”.
La dirección del Cunqueiro niega haber tomado la decisión de darle el alta
vigoalminuto ha contactado con fuentes cercanas a la Gerencia del Área Sanitaria de Vigo que han asegurado que la dirección del hospital “no ha tomado la decisión de que Ricardo fuese dado de alta”. Dichas fuentes han recalcado que esa decisión la ha tomado el médico, “en base a criterios médicos, exclusivamente criterios médicos” y que los mismos indicaban que el estado de este hombre “no necesitaba seguir ingresado”.
Desde la Gerencia se enfatiza que “en todo momento” se han considerado sus circunstancias personales y familiares y que, en base a ello, por medio de los servicios sociales, le han ofrecido la posibilidad de ser trasladado a una residencia de Pontevedra con la que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) tiene un concierto y donde podría haber pasado hasta tres meses.