El Celta-Betis comenzó más movidito de lo habitual fuera del estadio de Balaídos. La Policía Nacional acabó deteniendo a cinco seguidores célticos de entre 21 y 34 años por incidentes previos al partido y a los que se les intervinieron bengalas, una barra de hierro, una cadena metálica, barras de cable de cobre forradas, 20 canicas, estacas de madera y piedras, entre otras cosas.
Todo comenzó cuando los jóvenes comenzaron a tirar latas de cerveza y piedras a un coche que circulaba por Manuel de Castro con seguidores del Betis. Se abalanzaron sobre el vehículo, lo zarandearon y golpearon obligando al conductor a hacer una maniobra arriesgada para evitarlos que acabó con el coche chocando contra la mediana.
Agentes de la Policía Nacional que se encontraban en la zona acudieron en auxilio de los hinchas béticos y fueron recibidos con lanzamiento de cristales y piedras. Tras la ‘lluvia’, los jóvenes intentaron dispersarse, pero cinco de ellos fueron identificados por desorden y se levantaron cuatro actas por atentar contra la ley contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte y contra el Reglamento para la Prevención de la Violencia en los Espectáculos Deportivos.
