No tiene obligación legal de hacerlo y la difusión pública de sus bienes, como la de cualquier otro diputado, debe ser acordada por un juez, sin embargo el presidente del Congreso ha leído ante los miembros de la Junta de Portavoces del mismo una relación de sus bienes y propiedades. José Bono ha actuado de esta manera después de que el Partido Popular demandase que justificase su patrimonio, tras los rumores que se han difundido de que le ha comprado un piso de un millón de euros a uno de sus hijos.
Bono ha hecho así efectivo el ofrecimiento que les hizo a varios portavoces de manera individual y ha usado la misma documentación que remitió a la Fiscalía la semana pasada, en un acto que no tiene precedentes, no sólo en la historia de la Cámara Baja sino en ninguna de las cúpulas del legislativo, el judicial y el ejecutivo. Por si ello no fuese suficiente, todo lo dicho en la reunión se verá reflejado, tal y como señala el ordenamiento de las Cortes, en un acta que, además, se votará en la siguiente reunión de la Junta de Portavoces, por lo cual quedará reflejado de manera documental.
Según fuentes del Partido Socialista, este acto no excluye las acciones que ha emprendido el presidente del Congreso ante la Fiscalía, a la que ha pedido amparo para que actúe contra aquellas personas que, según indicó la semana pasada, están atentando contra su “honor y buen nombre“ intentando sembrar sospechas sobre su patrimonio y la procedencia del mismo.