Junto al tabaco y el cannabis, el alcohol es una de las drogas más consumidas actualmente incluso entre los menores de edad: el 74% de los niños y niñas con menos de 14 años han probado alguna bebida alcohólica, lo que convierte al alcohol en uno de los principales problemas de salud pública.
Estos son algunos de los datos presentados durante la celebración en Santiago de Compostela de una jornada sobre modelos para abordar las adicciones. Estos expertos aseguran que, como el cerebro no se forma completamente hasta los 23 o 25 años, la ingesta de alcohol afecta a los procesos cognitivos. Un consumo que en comunidades autónomas con leyes que prohíben la venta de alcohol a menores, como Galicia, se sitúa por debajo de la media.