Sólo era cuestión de flecos que se han ido acortando hasta llegar a acuerdo. Podemos e Izquierda Unida concurrirán en coalición a las próximas elecciones generales del 26 de junio después de que ambas formaciones acordaran situar a uno de los candidatos de IU en las listas por cada seis de Podemos, lo que de repetirse los resultados del pasado mes de diciembre daría a la formación de Alberto Garzón ocho escaños.
También ha confirmado que Garzón irá de quinto en las listas de la coalición por Madrid y que el candidato a la Moncloa será Pablo Iglesias. Todo para intentar crear una “lista ganadora” de la izquierda que amenazaría sobre todo al PSOE: en las últimas elecciones los socialistas consiguieron 5,5 millones de votos frente a los 5,2 millones de Podemos y el millón de Izquierda Unida.
Ambas agrupaciones han acordado un documento con 50 medidas que se comprometen a aplicar en caso de conseguir formar gobierno tras las nuevas elecciones, como el fin de los desahucios, crear una banca pública, poner en marcha un programa de renta garantizada, la lucha contra la precariedad laboral, la reestructuración de la deuda hipotecaria en los hogares, derogación de la LOMCE, tarjeta sanitaria universal, derogación de la Ley Mordaza o la reforma del sistema electoral.